Sitio 

Valparaíso se caracteriza por una morfología territorial abrupta, con una forma de habitar condicionada por las pronunciadas pendientes de sus cerros. Dentro de este paisaje, las quebradas se transforman en fisuras urbanas que provocan problemas de conectividad transversal entre ambos lados del cerro, lo que impide una rápida relación entre los servicios existentes y la comunidad. La quebrada se convierte en espacio público en desuso, el cual desencadena inminentes focos incendiarios y potenciales basurales en el sector. Por esto, y los últimos acontecimientos de catástrofe natural y emergencia sucedidos en el último año, se ha demostrado los altos índices de hacinamiento y carencia de servicios en esta zona. En consecuencia, la propuesta se emplaza entre el Cerro Las Cañas y Cerro Pajonal.

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Objetivos

La propuesta se origina considerando tres aspectos fundamentales observados a partir de las problemáticas existentes:

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Incorporar equipamiento deportivo y social para las partes altas de los cerros de Valparaíso, aprovechando el espacio cero existente entre ambos lados de la quebrada, disminuyendo la ocupación de suelo de zonas saturadas.

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Otorgar conectividad entre los cerros de la ciudad, por medio de enlaces transversales que permitan relacionar en menor tiempo los servicios existentes con la comunidad.

Recuperación del espacio público por medio de la activación de la quebrada, a través de la cual se generen estancias de paseo y solución a emergencias.

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Propuesta

El proyecto se plantea como un volumen-puente que cruza ambos lados de Quebrada Las Cañas. El puente se emplaza a nivel de calle, y por medio de plazas de acceso a ambos lados de la quebrada, se genera un diálogo entre el volumen y su contexto inmediato. Asimismo, y por esta operación, se plantea una pasarela que conecta ambos lados del cerro, con el fin de unificar y disminuir los tiempos de trayecto, obteniendo un edificio que genere identidad y cambio de paisaje en el retrato de Valparaíso. Dentro del puente se plantean dos volúmenes programáticos (talleres y camarines), los cuales se desfasan y proyectan hacia el exterior con el fin de generar una continuidad y extensión del volumen-puente con la comunidad y las plazas de acceso. La cancha se sitúa en el centro del volumen y a partir de ella se genera una versatilidad de acuerdo a situaciones de riesgo, como albergue para emergencias y centro de acopio para la comunidad. Por otra parte, la quebrada se transforma en un soporte activo de espacio público. Se recupera el fondo de quebrada para que generar diques, que mutan en plazas recreacionales y estanques de acumulación en caso de catástrofe.

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El proyecto se basa en una estructura-puente que lleva el límite la capacidad resiste del acero. Se posa como un puente-viga que unifica Cerro Las Cañas y Pajonal, transformándose en una nueva cara del paisaje urbano de la ciudad por modelo de una gran pasarela programática que brinda servicios deportivos y sociales.